Aprender a desconectar es algo
importante para todos y cada uno de nosotros y es que, a veces, los problemas
en lugar de marcharse parece que vengan más y más. Hoy en día, podemos tener
problemas de desconexión en muy diferentes ámbitos: familiares, económicos,
laborales, personales, etc…
Parece que poco a poco os vais a
animando a escribirme y esta semana Vicente, un lector del blog, me escribió
para pedirme algunos consejos de cómo poder desconectar. Es muy interesante el
tema de esta semana y creo que nos puede ayudar a todos. Me he puesto manos a
la obra y tras el trabajo de investigación, he seleccionado los que para mí son
los mejores consejos para saber desconectar:
Hacer deporte: hemos hablado
muchas veces de ello, pero en el fondo, creo que la gente no es consciente de
la importancia del mismo. No es solo el antidepresivo más eficaz, sino que nos
ayuda a dejar por un tiempo los problemas y a cargarnos las pilas.
Respetar tus tiempos libres y de
ocio: estar siempre ocupado con cosas del trabajo no es buena vida para nadie.
Aprender a domesticar tu mente y decirle: “¡Ya basta!” o “¡Por ahí no!”
aunque suene tonto, ayuda. De este modo, ayudamos a nuestra mente a ir por el
camino correcto. Cuando los problemas vuelvan a ti, recuérdale a tu mente que
no es el momento. A algunas personas les va bien poner un tiempo límite para
pensar sobre los problemas, por ejemplo, 10-15 minutos al día. Respetando ese
tiempo y no superándolo.
Darte caprichos: eso siempre es
bueno ¿o no? Pueden ser más pequeños o más grandes pero siempre te ayudaran a
mimarte ¿Si no te cuidas tu… quien lo hará?
Haz cosas que te gusten:
cualquier cosa viene bien para desconectar y más si te hace feliz. Leer,
pasear, viajar, escuchar música, tomar el café con los amigos, organizar alguna
actividad con los tuyos, etc…haz cosas que siempre quisiste hacer y nunca
pudiste ¡el momento es ahora!
Utilizar técnicas de relajación:
una de las cosas que a mí más me gusta hacer es escuchar música relajante, de
hecho, siempre que os escribo lo hago (en Youtube hay pistas de música relajante que pueden durar hasta varias horas.Recomendable). No solo me ayuda a relajarme sino
también a concentrarme más. Hay desde técnicas simples como la música, los
aromas, o una ducha larga hasta las técnicas de respiración o el yoga.
Realizar actividades con amigos y
familiares: son lo más importante de nuestra vida y, además, nos aportan
conversaciones distintas y eso nos ayuda a estar al día de nuestras relaciones
sociales.
Intentar no llevarse los
problemas a casa: este es un asunto que los psicólogos tenemos que seguir a
raja tabla; ¿Cómo hacerlo? Teniendo la voluntad de que: “¡no voy a permitir que
esto me afecte!” y sabiendo respetar los tiempos: “Este es mi trabajo, pero
ahora estoy en casa, por lo tanto, voy a disfrutar de lo que tengo y mañana
será otro día”. Si, ya sé... es más fácil decirlo que hacerlo pero es todo
cuestión de costumbre y práctica.
Organízate bien: no lo dejes todo
para última hora que luego vienen el estrés y las prisas.
Aprender a ser agradecido:
aprender a ver las cosas buenas que te ha dado la vida y no te centres tanto en
las malas. Y piensa que todos los tiempos malos algún día se van.
Espero que estos consejos os hayan ayudado y recordar que los caminos para una buena vida y para encontrar la felicidad empiezan por luchar y por trabajar por lo que queremos. Difícilmente nuestros problemas se evaporaran de nuestra cabeza si no nos ponemos manos a la obra y actuamos. Solo cae del cielo la lluvia.
Nos vemos por Facebook.
"Sé fuerte. No importa por lo que estés atravesando...sé fuerte. Nada es permanente, todo es temporal. Cada cosa pasará, y en algún momento tu vida mejorará. No te deprimas, pues tú haces de tus días lo que tú quieres que sean. Aprovéchalos. Vívelos. Sonríe, vence tus temores. Llora si tienes que hacerlo, saca lo que llevas dentro. Pero jamás decaigas. Pues en esta vida no tendrás carga tan mayor que no puedas soportar"